Misterios, mentiras y cruceros

El intendente Gustavo Pulti está decidido a inaugurar la Terminal de Cruceros en este segundo semestre del año, aunque le falten un par de detalles importantes. Le falta dragar los 150 metros al pie del muelle donde se levanta el edificio y no tiene un crucero para darle sentido al acto.

El anuncio con la novedad lo lanzó el propio Jefe Comunal al sitio especializado “Noticias de Cruceros”, que ilustra esta columna, el pasado 9 de julio. El Intendente no brindó mayores detalles que el plazo que resta para cortar las cintas: 100 días.

Siguiendo esa promesa, ya quedan 80 para que el edificio de más de 1600 m2 dispersos en dos plantas, espacios para gastronomía, uno de ellos con una terraza y fantástica vista al mar, oficinas para los trámites aduaneros y migratorios, salón para conferencias y muestras de arte, una cisterna para 750.000 litros de agua y un frente de muelle tan flamante como el equipamiento de seguridad, reciba más visitantes que los empleados del Consorcio Público Escollera Norte, los responsables del área.

En el video del reportaje que incluye la noticia -realizado en su despacho privado- Pulti asegura que, palabras más, palabras menos,  la inauguración será posible a partir del trabajo de dragado que se viene realizando en el puerto marplatense con el apoyo financiero de la Provincia y la Nación.

Muy convencido de sus palabras no debe haber quedado tras el encuentro con el cronista de “Noticias de Cruceros” porque la novedad no trascendió del medio especializado. Una noticia como esa le garantizaba un gran espacio en diarios, portales y canales abiertos y de cable. Quizás el Intendente ya se ha dado cuenta que los marplatenses no soportan más anuncios y quieren ver hechos.

Tal vez Pulti comprendió que no podría ir muy lejos con lo que se olvidó de aclararle al periodista de “Noticias de Cruceros”. La obra adjudicada a la UTE de capitales nacionales y dragas chinas no incluye el pie de muelle donde se levanta el edificio de la Terminal de Cruceros. 

El dragado afecta a la industria de cruceros en Mar del Plata en el mismo nivel que la Terminal influenció a las armadoras de embarcaciones de lujo para que lleguen a este puerto.  En nada. Si el Intendente desea inaugurar el edificio que está terminado desde hace 32 meses y por el que se gastaron más de 30 millones de pesos, podría hacerlo mañana mismo porque no tiene impedimento alguno. Recibir un crucero, en ese muelle, ya presenta otras dificultades.

La incompatibilidad de un crucero con la Terminal quedó en evidencia el 22 de marzo pasado cuando arribó el Ocean Diamond. Ese barco no amarró en el muelle frente a la Terminal porque la posibilidad de quedar encallado era más que un riesgo. Una certeza. El corte de cintas debió seguir esperando, lo mismo que el tributo a Eduardo Tomás Pezzati. Su hija Marcela, ya anticipó a sus conocidos y allegados que así se llamará el edificio.

El Ocean Diamond tenía 124 metros de eslora y un calado de 6 metros, que le permitió superar airoso el canal secundario de acceso al puerto, pero era mucho para los menos de 5 metros de profundidad que hay al pie de muelle de la Terminal de Cruceros por inaugurar.

Valeria Méndez, vicepresidente del Emtur, fue la encargada de recibir a los 184 pasajeros de la embarcación. "Ya se empiezan a ver los resultados del trabajo conjunto del intendente Gustavo Pulti, el gobernador Daniel Scioli y el ministro Florencio Randazo”, dijo la funcionaria municipal aquel sábado al mediodía sin ponerse siquiera colorada.

Los pasajeros no tuvieron tiempo de escucharla. Abandonaron rápido el puerto marplatense porque perdían el vuelo internacional de regreso a sus países de residencia. Ese había sido el motivo por que cual ingresaron a Mar del Plata. Valeria demuestra que el legado de Eduardo Tomás sigue vivo en Mar del Plata.

En un primer momento se pensó que Pulti convencería a la UTE que hace el dragado para que se haga una extra y profundicen el área donde deben amarrar los cruceros. El rumor cobró fuerza cuando actores de la industria pesquera informaron haber visto  a la draga de cuchara operar un par de días al pie del muelle de la Terminal.

Claudio Cuevas, gerente de Servidraga, una de las empresas que integra la UTE, hizo añicos cualquier hipótesis de dragado con “yapa”. “No es un sector dentro del plan de trabajo”, sentenció.

¿Por qué Pulti dice 100 días? Tal vez el Jefe Comunal intente ligar la finalización de la obra de dragado, previsto para octubre, con la inauguración de la Terminal, aunque, como vemos, nada tiene que ver una cosa con la otra.

Pero sabiendo que sin dragar el pie de muelle no tendrá un crucero para la foto, Gustavo Pulti comenzó una ronda de consultas con funcionarios provinciales para buscar financiamiento y realizar la obra.

“Necesito 40 millones de pesos”, le pidió Pulti a Martín Ferré, secretario general de la Gobernación de la Provincia de Buenos Aires. No fue la única gestión que encabezó el intendente. Les solicitó a sus colaboradores y concejales que incentiven los contactos para atraer inversores capaces de transformar el cordón de piedra en la Escollera del Ruido, tal su ambicioso proyecto para ese sector del puerto marplatense.

El concurso de ideas promovido por el Consorcio para cambiarle el perfil a la escollera del puerto tiene un ganador: los arquitectos Adolfo y Pablo Mondear. El proyecto tiene una extensión de más de mil metros y casi 100 mil metros cuadrados con la instalación de locales comerciales, plazas secas, áreas culturales, cines y espacios recreativos. Pasaron más de dos años y como el circuito donde correría la Fórmula Uno, nada se escapó de la maqueta.

En la Provincia por ahora se hacen los distraídos. No tienen fondos para completar el pago a la UTE que hace el dragado –se cree que saldrá con el presupuesto del año que viene- mucho menos para inflar el globo de los cruceros. “Esa obra no sale ni un cuarto de lo que pidió. Quizás necesite tapar otros agujeros”, confesó un opositor en el Concejo Deliberante, al tanto de la movida oficial.

Parte de razón tiene el edil. La obra para aumentar la profundidad a pie de muelle no es tan cara y podría hacerse desde la propia Escollera. La draga de cuchara era una herramienta ideal, aunque podría hacerlo la draga que dibujó el conducto donde se apoyó el emisario submarino.

Suponiendo que Pulti logre encontrar la manera en profundizar el sector y los fondos para pagar la obra, para el acto inaugural le falta un actor principal: el crucero.

Marina Port Service es una agencia marítima que suele trabajar con embarcaciones de lujo. Carlos Vuotto, su gerente, aseguró que para los próximos tres meses no figura en su giro de crucero alguno. “Tenemos un pedido de ingreso para febrero 2015”, reveló.

Señorans es otra agencia marítima que opera con cruceros en el puerto de Mar del Plata. Juan Carlos López, uno de los socios, aseguró que tampoco tienen reserva de giro para lo que queda del año y tampoco para el verano del año próximo.

¿Qué crucero vendrá a cumplir el sueño del Intendente y romper el invicto de una Terminal que se ha trasformado en el símbolo de la ciudad a contra mano del sentido común? En 80 días veremos.